Como cada año, por Navidad, se disparan las solicitudes de adopción de animales de compañía, ya que son uno de los regalos más deseados. Pero tenemos que tener muy en cuenta que, ni perros, ni gatos, ni ningún otro animal, debería ser nunca regalado por sorpresa, como un objeto material más. Adoptar a una mascota es una decisión importante, y la integración de este nuevo miembro en el núcleo familiar debe hacerse con rigurosidad y de forma consciente, ya que comporta un alto grado de compromiso y responsabilidad y nunca debe ser una decisión tomada de forma impulsiva o por ilusión.

La problemática del abandono de perros y gatos en España sigue en aumento, y la raíz principal radica en la falta de conciencia sobre las responsabilidades y compromisos que implica adoptar y cuidar a una mascota. Aunque muchas adopciones comienzan con entusiasmo, la falta de un enfoque responsable a menudo conduce al descuido de las necesidades básicas de los animales, llegando incluso al abandono.

¿Pero qué implica realmente la tenencia responsable?

Debemos considerar que se trata de un compromiso a largo plazo, y que el animal entra a formar parte de la familia como un miembro más, y merece todos los cuidados necesarios para asegurar su bienestar. Por ello, la primera pregunta es: ¿Estamos todos de acuerdo en adoptarlo? Es importante que todas las personas estén de acuerdo en su incorporación al núcleo familiar.Además, antes de la adopción, es necesario plantearse:

• ¿Qué cuidados básicos requiere? Debemos tener al día su calendario de vacunación, y realizar una desparasitación periódica para protegerle de pulgas y garrapatas, con antiparasitarios de última generación, como Frontpro, el primer comprimido masticable, de muy fácil administración. Además, es imprescindible ofrecerle atención veterinaria de manera periódica.
• ¿Podré dedicarle el tiempo que necesita? Además de la atención diaria de sus necesidades básicas de alimentación e higiene, también es importante destinar tiempo al juego, al baño y al afecto.
• ¿Cuánto me costará? Dependerá de la raza y el tamaño del perro, pero no debemos escatimar recursos para aquellas cosas que son absolutamente necesarias como la alimentación y la atención médica.
• ¿Qué hago si no se porta bien? Debemos considerar dedicar tiempo y recursos a su educación, de cara a mejorar su comportamiento, si fuera necesario, con ayuda profesional, sobre todo, teniendo en cuenta que el comportamiento problemático del animal, es uno de los motivos principales de abandono.
• ¿Tendré que hacer cambios en casa? La llegada de un peludo a casa, siempre conlleva cambios, pero siempre para bien. Si bien es cierto, que debemos crear un espacio seguro para que el perro disponga de todos los elementos que necesite y no tenga acceso a productos o sustancias que puedan dañarle.

Hay que tener en cuenta que la esperanza de vida media de un perro oscila entre los 12 y los 17 años, en función de su tamaño y raza, por ello, los cuidados que le brindamos a lo largo de la vida, pueden condicionar su estado de salud en la vejez. Así pues, si queremos disfrutar de su compañía durante mucho tiempo y mantenerlo sano y fuerte, debemos tener muy presentes estos cuidados básicos e imprescindibles.

Asimismo, gracias a la puesta en marcha de la nueva Ley de Bienestar Animal se da un paso más para asegurar la tenencia responsable.

La prohibición de la compra de perros, gatos y hurones en tiendas o las importantes sanciones, el dejar a un animal de compañía sin supervisión, o sanciones más duras para el abandono y maltrato, de hasta 200.000€, son algunos de los aspectos más destacados de esta nueva ley.

En Boehringer Ingelheim, expertos en el cuidado y el bienestar de los animales desde hace más de 50 años, queremos ayudar a sensibilizar a la población y dar visibilidad al problema, poniendo de relieve la importancia de una tenencia y de un cuidado responsable de las mascotas, que garantice un hogar adecuado a todos los animales.