IM VETERINARIA #59

26 zando la importancia de buscar ayuda profesional, mejorar la comunicación con los clientes y adoptar estrategias para manejar el estrés. El burnout, un síndrome cada vez más frecuente El burnout se caracteriza por una sensación de agotamiento emocional, un distanciamiento mental de las tareas laborales y una pérdida de eficacia personal. Para los veterinarios, este trastorno puede manifestarse de varias formas: desde la fatiga extrema y la falta de motivación, hasta el desarrollo de actitudes cínicas hacia los clientes o la sensación de estar “quemado” emocionalmente por el contacto continuo con el sufrimiento animal. El estrés laboral en la veterinaria es particularmente intenso debido a factores como la exposición a situaciones difíciles, la toma de decisiones complejas, la comunicación de malas noticias a los dueños de los animales, la responsabilidad de “salvar vidas” y las largas horas de trabajo. Estos factores son solo algunos de los que contribuyen a una creciente sensación de agotamiento entre los veterinarios, que también lidian con expectativas poco realistas de la sociedad y, en muchos casos, una remuneración económica que no refleja el nivel de responsabilidad y especialización que implica la profesión. La verdadera cara del estrés en la profesión veterinaria Este síndrome no es exclusivo de los veterinarios, sino que afecta a muchos profesionales de la salud, como médicos y enfermeros. Uno de los factores que diferencia a la veterinaria de otras profesiones de la salud es la exposición a dilemas éticos. Los veterinarios tienen la compleja tarea de tratar a los animales, sin la protección que brindan sistemas como la sanidad universal para los humanos. De acuerdo con un informe del 2023 de la Asociación de Veterinarios Especialistas en Pequeños Animales (AVEPA) y la Universidad Autónoma de Barcelona, hasta un 20 % de los veterinarios encuestados mostraron signos sugestivos de depresión. Un 38 % de los profesionales valoraron como “malo o regular” su estado de salud físico, mientras que el 47 % indicaron lo mismo respecto a su salud mental. La presión de tener que tomar decisiones cruciales con presupuestos limitados y la frustración de no poder ofrecer tratamientos completos, son solo algunas de las tensiones que enfrentan en su día a día. Por otra parte, la cultura de entrega vocacional impulsa a los veterinarios, pero también los lleva a poner las necesidades de los animales y sus dueños por encima de las suyas propias. Un término específico, fatiga por compasión, describe el agotamiento emocional derivado del contacto con el sufrimiento y la muerte de los pacientes, en este caso, los animales. A esta fatiga se suman las tensiones derivadas de los dilemas éticos, como el trato con animales cuyo tratamiento está condicionado por la capacidad económica de los propietarios, lo que genera una carga emocional y moral para los profesionales. ¿CUÁNTAS VECES PIENSA QUE TRABAJA DEMASIADO? % Fuente: Journal of the American Veterinary Medical Association 261, 5; 10.2460/javma.22.09.0407 Una vez por semana La mayoría de días Cada día Unas cuantas veces al año Nunca Una vez por mes Unas cuantas veces al mes 3,5 4,9 11,7 15,9 11,3 20,6 31,9

RkJQdWJsaXNoZXIy NTI5ODA=