65 Ley de Bienestar Animal El 2023 estuvo marcado por una serie de transformaciones profundas en el sector canino, impulsadas por el desarrollo de la Ley de Bienestar Animal. Aunque todavía queda trabajo por hacer, la nueva legislación ha tenido un impacto directo en las actividades de la RSCE, y así lo explica su presidente: “Este año ha estado marcado por el desarrollo de la Ley de Bienestar Animal, que ha influido mucho en nuestra actividad, tanto en la de los criadores como en la de las personas que se interesan por los perros de raza”. No obstante, la ley no solo afecta a la cría y la venta de animales, sino también a aspectos fundamentales como la protección de los animales y el establecimiento de nuevas normativas en cuanto a la tenencia responsable de mascotas. La legislación ha supuesto un desafío para la RSCE, pero también una oportunidad de alinearse con las mejores prácticas de bienestar animal, fortaleciendo su imagen y promoviendo la cría responsable. A nivel legislativo, la RSCE está centrada en seguir colaborando en la mejora de los reglamentos relacionados con la Ley de Bienestar Animal, en particular en lo que respecta a las nuevas normativas que se desarrollarán en los próximos meses. El presidente de la sociedad hace hincapié en el futuro decreto sobre núcleos zoológicos, que considera clave para regular la cría y la gestión de animales de raza en España. Conservación de razas autóctonas Uno de los pilares fundamentales de la RSCE es la preservación y promoción de las razas autóctonas españolas, un compromiso que ha formado parte de su misión desde su fundación. Este año, uno de los grandes logros ha sido el reconocimiento internacional de la raza Ratonero Bodeguero Andaluz por parte de la Federación Cinológica Internacional (FCI), lo que supone un espaldarazo para su consolidación y expansión fuera de las fronteras españolas. Doval Sánchez celebra este avance, destacando que posibilita su participación en exposiciones internacionales y refuerza la visibilidad de la raza a nivel global. “Conseguir el reconocimiento internacional de esta raza es un espaldarazo crucial para su futuro”, explica. La RSCE dedica una especial atención a las razas autóctonas que se encuentran en situación vulnerable o de peligro de extinción. En este sentido, la asociación continúa trabajando en programas de protección y recuperación de razas que están en riesgo de desaparecer. “Tenemos un programa específico para aquellas razas que están en un estado delicado, ayudando a los criadores a registrar y garantizar la identificación de sus perros, facilitando la trazabilidad desde su nacimiento”, menciona. Asimismo, la asociación cuenta con un área especial dedicada a razas en recuperación, conocidas como “grupos étnicos”, que buscan asegurar la continuidad de razas en peligro de desaparecer. La práctica veterinaria, un pilar para el bienestar animal En cuanto a la relación con los veterinarios, Doval Sánchez destaca el papel fundamental que juega la ciencia veterinaria dentro de la RSCE. “La veterinaria, como ciencia, es cada vez más importante dentro de nuestra actividad. No solo nos aseguramos de que las prácticas de cría y tenencia estén alineadas con los estándares de bienestar animal, sino que también contamos con un área científica que integra a veterinarios”, señala. Uno de los aspectos más destacados de la RSCE es que el Comité Directivo cuenta con un miembro veterinario de prestigio: el Dr. Joaquín Cerdeira, profesor en la Facultad de Veterinaria de la Universidad Complutense de Madrid, quien dirige la Comisión Científica de la FCI. “El Dr. Cerdeira es el encargado de supervisar todas nuestras actividades para asegurarnos de que todas las iniciativas de la RSCE cumplen con los criterios científicos y de bienestar animal”, agrega. Esta colaboración científica es crucial, ya que busca promover una cría responsable y garantizar que todos los procesos, desde la reproducción hasta la venta y el cuidado de los perros, sigan los más altos estándares de salud y bienestar animal.
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