57 resulta prioritario que se nos permita, como sanitarios que somos, el acceso a determinadas especialidades del Sistema Nacional de Salud, como inmunología, virología y microbiología. Por otro, para combatir la precariedad de la profesión, hay que limitar el excesivo número de facultades de Veterinaria que hay en España, 15 en la actualidad, porque el volumen de egresados anual no lo absorbe el mercado laboral”, expone Calvo Sáez. Recalca, una vez más, la necesidad de rebajar el IVA veterinario: “La salud de un animal de compañía no puede gravarse como un artículo de lujo, porque es parte de la Salud pública”. En la OCV les parece algo “injusto y abusivo”. De la telemedicina, juzga que debe verse como un medio de apoyo, complementario, porque “la presencialidad es indispensable en la práctica clíniUna apuesta firme por la formación continua La apuesta de la OCV por la formación continua es firme y los resultados confirman un alto grado de aceptación. A lo largo de 2023, más de 19.000 veterinarios utilizaron su plataforma de formación, con 505 horas impartidas. La cifra multiplica por cinco la registrada en 2019. Luis Alberto Calvo Sáez remarca que son seminarios, cursos y casos prácticos, casi siempre gratuitos, sobre contenidos muy diversos y de claro interés para los veterinarios, “conscientes de la relevancia de poner al día sus conocimientos dentro de una profesión sujeta a constante evolución”. “ES NECESARIA MAYOR CONCIENCIACIÓN SOCIAL SOBRE LA IMPORTANCIA DEL CUIDADO Y LA PROTECCIÓN DE LOS ANIMALES” ca”, más si cabe cuando los pacientes, los animales, no hablan. “Puede servir de manera puntual en casos ya diagnosticados”, puntualiza. Si bien, “la llegada de la inteligencia artificial (IA) abre una nueva era en nuestra profesión”. Sopesa que una correcta interpretación de los datos puede ayudar a la toma de decisiones en diferentes facetas, desde la práctica clínica (diagnósticos, tratamientos, etcétera) a la producción animal y, por supuesto, la seguridad alimentaria. Con todo, esta institución representa a los más de 37.000 veterinarios colegiados del país, que van a poder acceder al Plan de Formación en Competencias Digitales en el Ámbito de las Profesiones Colegiadas, coordinado por la Unión Profesional y articulado en un programa de 150 horas de duración, que resultará gratuito para los alumnos, con un módulo común, uno específico y otro práctico. “La digitalización va a ayudar a mejorar la calidad de los servicios en su actividad diaria”, concluye. Hay que adaptarse a los cambios tecnológicos porque de ello depende parte de la productividad, y la veterinaria no puede quedar al margen.
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