IM VETERINARIA #57

63 Los veterinarios internistas españoles, a la conquista internacional Con todo, Varo afirma que no solo ha evolucionado la especialidad, sino que en general “estamos viviendo en una etapa dorada en la medicina veterinaria”. Recuerda al respecto que, “en los últimos 20 años, se está avanzando a un ritmo sorprendente, y estamos consiguiendo tanto a nivel nacional como internacional un nivel de medicina muy bueno”. Dentro de la medicina interna en España, cree que “somos un país bastante afortunado”. “Contamos con unos especialistas muy buenos que destacan no solo dentro del ámbito nacional, sino también internacional. Hay españoles que son referentes tanto en Europa como a nivel mundial, y que además investigan y publican de manera continua”, asegura Varo. Es tal la velocidad a la que se está publicando y tan grandes los avances que se están consiguiendo en diferentes versiones de enfermedades que resulta complicado mencionar solo algunos de los cambios más importantes. No en vano, apunta el veterinario, “empezamos a poder tratar patologías que hace 10 años era impensable”. Aunque considera que, “donde más se está avanzando, es en el camino de la inmunología, en aquellas enfermedades inflamatorias inmunomediadas como pueden ser la trombocitopenia inmunomediada o la anemia hemolítica inmunomediada”. Y también, a nivel digestivo, con el estudio del microbioma se está logrando mucho en los últimos tiempos. Todo ello va en paralelo con los desarrollos en medicina humana. En palabras del responsable del Servicio de Medicina Interna del Hospital Veterinario Retiro, “cada vez se está dando más importancia y se están descubriendo más beneficios a la regulación del microbioma”. Pero no solo a nivel gastrointestinal, matiza, “también se ha evidenciado la presencia de diversos ejes gastrointestinal, tanto con el riñón como con el cerebro, que pudiendo modular la dieta podemos obtener mejoras en pacientes con enfermedad renal crónica o epilepsia, respectivamente. Entonces, el estudio del microbioma que es algo relativamente reciente, nos está abriendo un campo muy interesante”. Por otro lado, uno de los fármacos más revolucionarios que ha entrado en el mercado es Senvelgo para el tratamiento de la diabetes felina. Para el experto, “nos va a facilitar mucho la vida a la hora de abordar una de las enfermedades más difíciles de tratar”. En cuanto a las enfermedades más prevalentes en la práctica clínica de un especialista en medicina interna, el facultativo apunta que “depende de la zona en la que vivas y si trabajas de referencia o no”. Sin embargo, bajo su punto de vista, “las patologías más comunes en España son las infecciosas, y dentro de estas, la leishmaniasis”. Por otro lado, como enfermedades endocrinas más frecuentes en perro, menciona el hipercortisolismo o síndrome de Cushing; en gatos, por su parte, sería el hipertiroidismo. Y en el marco de las metabólicas, considera que “las enfermedades gastrointestinales, junto con las renales, son las que vemos con mayor frecuencia”. Las similitudes entre medicina interna en humanos y en pequeños animales Cabe resaltar que, en gran medida, las afecciones que aborda la medicina interna veterinaria son las mismas que en humanos como mamíferos que son. “Hay algunas más específicas, como las infecciosas, pero las metabólicas y endocrinas son exactamente igual”, indica Varo. Sobre la similitud de la medicina interna humana y veterinaria, se puede resumir en que “vamos un pasito por detrás”. “En nuestro día a día, nosotros trabajamos basándonos en la evidencia científica. A veces esta evidencia que tenemos no es suficiente y recurrimos a la medicina interna humana para guiarnos. Evidentemente, en medicina humana el número de pacientes y medios es infinitamente superior “EN NUESTRO DÍA A DÍA, TRABAJAMOS BASÁNDONOS EN LA EVIDENCIA CIENTÍFICA. A VECES ESTA EVIDENCIA QUE TENEMOS NO ES SUFICIENTE Y RECURRIMOS A LA MEDICINA INTERNA HUMANA PARA GUIARNOS” respecto la medicina interna en animales”, aclara. Por otro lado, subraya, “la incorporación de los seguros médicos ha supuesto un avance en el tema económico, ya que a veces no se puede llegar a un diagnóstico definitivo por la falta de pruebas, esto en nuestro país, gracias a Dios, no pasa”. Al respecto de las asignaturas pendiente, Varo también echa en falta cierta confianza en los especialistas para la remisión de casos por parte del veterinario generalista, “pues a veces llegan pacientes con estadios de la enfermedad demasiado avanzados”. Además, dado que es una especialidad que se encarga de la atención integral del animal, el abordaje de los pacientes es un tanto complejo. Bajo su experiencia, “se basa mucho en hacer una buena anamnesis, un buen diagnóstico diferencial”. Y otra de las claves es “el continuo aprendizaje que debemos tener los internistas, pues está avanzando tan rápido que lo que hace tres años se usaba, ya no se está utilizando”. Es importante destacar, asimismo, que en los últimos años han confluido dos factores fundamentales para cambiar la evolución de la medicina veterinaria. En primer lugar, “la incorporación de la mascota al núcleo familiar; el animal ya no es ese perro de finca que veías una vez por semana, sino que es igual que un miembro de la familia. Eso crea un vínculo emocional que conlleva que el propietario se involucre más”, manifiesta Varo. En este sentido, la incorporación de los seguros ha sido fundamental. “Los costes veterinarios son elevados, pero no porque los veterinarios seamos caros, sino porque la medicina cuesta mucho, y además disponemos de un 21 % de IVA”. Por lo tanto, concluye, “esto ha marcado la diferencia, facilitando mucho a los propietarios el hecho de poder diagnosticar y tratar a sus mascotas”.

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