IM VETERINARIA #35
19 im veterinaria inconveniente que crean un gasto fijo por el alquiler y rellena- do de la bombona. Adquiriendo un concentrador se hace una inversión inicial mayor, pero a largo plazo el coste es menor que con un tanque de oxígeno. Este equipamiento básico puede no requerir una alta inver- sión, pero como veremos necesita de otros equipos para me- jorar la seguridad y eficiencia de la técnica anestésica. También existen estaciones de anestesia que suelen integrar los elementos anteriormente descritos en conjunto con equipos de monitori- zación y ventilación mecánica además de otros accesorios. Suponen una inversión mayor. Monitorización: evita imprevistos La monitorización anestésica consiste en observar al paciente anestesiado y medir y vigilar distintos parámetros con el fin de detectar posibles com- plicaciones anestésicas y aplicar un tratamiento. Una monitorización adecuada reduce la aparición y gravedad de accidentes anestésicos que pueden comprometer la vida del paciente. Además de la observación directa del paciente por parte del anestesista, existen equipos que miden distintos parámetros y facilitan la evaluación del estado general del paciente. Entre ellos destacan: Pulsioxímetro: informa sobre la saturación de la he- moglobina por oxígeno y sobre frecuencia cardía- ca. Permite detectar situaciones de hipoxia tisular. Capnógrafo: Mide la concentración de CO2 en el extremo del tubo endotraqueal durante todo el ciclo respiratorio del paciente. El análisis de esta información sirve para verificar la correcta intu- bación del paciente, así como el buen estado y adecuación del circuito anestésico. Además, da información sobre el intercambio gaseoso en el tejido pulmonar. Electrocardiógrafo: mide la actividad eléctrica de las fibras musculares cardiacas haciendo po- sible detectar arritmias o alteraciones en la fre- cuencia cardíaca. Medidor de presión arterial: valora la presión arterial sistólica, diastólica y media. El manteni- miento de éstas en rangos adecuados es impor- tante para asegurar una correcta perfusión en los órganos vitales durante la anestesia. Termómetro: se puede medir la temperatura me- diante el uso de un termómetro convencional o tomar una medición continua de este parámetro mediante el uso de una sonda de temperatura. Es vital una buena formación y una constante actualización de conocimientos por parte del veterinario anestesista Todos estos equipos se pueden adquirir de forma indepen- diente y escalonada, reduciendo el desembolso inicial de di- nero o adquiriendo un monitor multiparamétrico, que incor- pora varios o todos los equipos de monitorización descritos. La principal ventaja es que al ser equipos compactos la infor- mación que dan está a un golpe de vista. Su compra supone un menor gasto que la compra de los equipos de monitoriza- ción por separado. Otro equipamiento Además de la inversión en la máquina de anestesia y la mo- nitorización hay otros elementos que pueden ser de elevada utilidad en anestesia inhalatoria. Entre ellos están los elementos para control de la temperatura del paciente. Una eventual hipotermia perioperatoria puede alargar los tiempos de recuperación anestésica y producir alte- raciones que dificulten el desarrollo correcto de la cirugía. Para ello es recomendable evitar las pérdidas de calor tanto de for- ma pasiva con colchonetas, mantas, empapadores, etc. Como de forma activa con mantas eléctricas, lámparas de infrarrojos, calentadores de fluidos, etc. Otro equipo a tener en cuenta es el ventilador mecánico, de gran ayuda en muchas situaciones y de uso necesario en algu- nos tipos de cirugía como la torácica o la laparoscópica. Me- diante la ventilación mecánica se controla la cantidad de aire que inhala y exhala el paciente, así como la frecuencia respira- toria y otros parámetros, lo que facilita el que haya un correcto intercambio gaseoso en los pulmones. Finalmente, otros artículos como las cámaras de inducción, los laringoscopios o las bombas de infusión son elementos no indispensables pero útiles en función de las preferencias del veterinario y procedimiento a realizar. Conclusiones Existe una gran variedad de opciones a la hora de invertir en equipos de anestesia inhalatoria y no hay una que sea ade- cuada para todas las situaciones. Se trata de valorar qué es lo mejor para los pacientes, el centro y los profesionales, tenien- do en cuenta el capital disponible y el tipo de intervenciones que se realizarán. Además de la inversión en la compra es indispensable un gas- to en mantenimiento, revisión y calibrado de los equipos para evitar fugas, aportes insuficientes de oxígeno o errores en la administración de gas anestésico. Los gases anestésicos pue- den resultar nocivos para los profesionales que trabajan con ellos y también es importante eliminarlos correctamente me- diante filtros de gas anestésico o sistemas de extracción. Por último y no menos importante que todo lo anterior, una buena formación y una constante actualización de conoci- mientos por parte del veterinario anestesista es vital para que estos procedimientos sean efectivos y seguros. Autor: Miguel Rubí Veterinario. Asesor Comercial Centauro (www.centauro.es )
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