IM VETERINARIA #13 ANUARIO

81 anuario 2018 nales, porque cuando hace buen tiempo los animales salen más a la calle y se abren las ventanas de las casas, aumentando los riesgos de sufrir más caídas o accidentes”. En otro nivel de menor incidencia, señala esta especialista los animales que arrastran un proceso crónico, como tumores, pancreatitis o problemas endocrinos, o los que llegan con un cuadro de urgencias neu- rológicas o intoxicaciones. Respecto a estas últimas, asegura que “los hay que acuden a consulta drogados por ingerir mari- huana o cocaína, o intoxicados por comerse pastillas de sus pro- pietarios” . Evolución en el abordaje Para la especialista, es en el abordaje de los animales donde se ha visto una evolución positiva. En su opinión, los profesio- nales bien formados son capaces de abordar de una manera más cuidadosa y eficaz a los pacientes en shock hipovolémi- co, séptico o cardiológico, “situaciones bastante frecuentes que se manejan de forma muy concreta”. Explica al respecto que es muy importante tener claro que las situaciones límite “no son sólo lo que se ve, sino también lo que no se ve, por lo que en Medi- cina de Urgencias, y también en Medicina Interna, hay que tener en cuenta que cuando pasa algo que ves, están afectándose otras cosas que no ves, a nivel celular” , de manera que “si conoces eso que pasa a este nivel que no se aprecia o lo que puede pasar, su tratamiento va a estar mucho más a la medida y va a ser más cuidadoso y eficaz”. También respecto a la Medicina felina piensa que se ha mejo- rado muchísimo en el manejo de los gatos. “Si sabemos cómo hay que tratarlos, disminuye mucho la agresividad, y en este sen- tido existen muchas campañas que abordan este tema”, apunta. Para concluir, Itala Sunyer sugiere que se ofrezcan las oportuni- dades necesarias para que pueda haber más personal auxiliar bien formado e interesado en este tema. Reconoce haberse encontrado, a lo largo de su trayectoria profesional, con auxi- liares en Emergencias y Cuidados Intensivos “muy vocacionales y con mucha conciencia de lo que significa la especialidad, pero son muy pocos; hacen falta más” . daderamente lo que implican las Emergencias y Cuidados Inten- sivos”. Desarrollo de protocolos Cree, además, que las urgencias veterinarias son siempre “lo que nadie quiere hacer”, ya que suponen “trabajar en horarios a los que no estamos acostumbrados y tampoco está recompensa- do a nivel económico”. Eso sí, reconoce que hoy en día el acceso a la información específica es muy fácil gracias, por una parte, a Internet, y por otra, las sociedades que otorgan mucho so- porte a la especialidad a nivel de formación y de promoción de la profesión. Precisamente en este ámbito fuera de nuestras fronteras es en donde se están desarrollando actualmente al- gunos “protocolos para valorar estatus (estados de shock, etc.), con el fin de tener parámetros objetivos para valorar a los anima- les ”. Subraya que también se publican estudios “sobre nuevos abordajes de problemas tradicionales, y acerca de la idoneidad o no de algunos fármacos o sueros que se han utilizado históri- camente, dado que con el incremento de la casuística, se permite tener más experiencia y más evidencia médica”. Técnicas de diagnóstico punteras Otra cosa distinta son los avances en el ámbito del diagnóstico y abordaje de los pacientes. En este terreno, asegura que ahora “se disponen de técnicas de imagen más avanzadas” , así como dispositivos de drenaje más adecuados y adaptados a peque- ños animales. “En muchos centros ya se pueden hacer ecogra- fías rápidas para animales traumatizados o desestabilizados, y más centros disponen de TACs”, recalca . También es fácil que los centros de Urgencias cuenten con bombas de infusión para infundir el suero, “lo que hace muy cómodo el manejo de este tipo de pacientes tan críticos”. A nivel de diagnóstico también añade que se pueden hacer gastrometrías con aparatos fáciles de manejar, así como test rápidos “para saber parámetros muy concretos que aportan mucha información o información muy relevante para determinar qué le está pasando al paciente” . A Itala Sunyer le parece importante el hecho de que, en general, todas las máquinas de laboratorio se han simplificado mucho “con el objeto de que se puedan utilizar por cualquier profesional veterinario en cualquier horario” . Apunta que “evidentemente hay máquinas más sofisticadas que miden la osmolalidad de la sangre, o la tromboelastografía (coagulación), pero no están to- davía a nuestro alcance, y sí lo están en otros países europeos y en Norteamérica”. Desde problemas digestivos a intoxicaciones Según cuenta, basándose en su experiencia en la atención de perros y gatos, los problemas digestivos son los más frecuen- tes en las dos especies, con síntomas como vómitos y diarreas. En segundo lugar, las patologías genitourinarias, con infeccio- nes de matriz, de orina o problemas de obstrucción uretral en los gatos. En tercer lugar, los problemas cardiorrespiratorios, “donde los animales llegan con la función cardiaca descompen- sada ”. Finalmente, problemas respiratorios “puros ” y traumatis- mos. Respecto a estos últimos comenta que “suelen ser estacio- Más de 20 años Conmás de 20 años de profesión, Itala Sunyer comenzó su carrera como veterinaria de Urgencias y realizó estancias en diversos hospitales nacionales e internacionales. Está acre- ditada por Avepa en Emergencias y Cuidados Intensivos Veterinarios y es cofundadora de Survet Diagonal, centro es- pecializadoenEmergencias yCuidados intensivos yHospital de Referencia y Servicios a Veterinarios. Asimismo es cofun- dadora del Grupo de Emergencias y Cuidados Intensivos de Avepa y, actualmente, presidenta del mismo.

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