El enriquecimiento ambiental durante la alimentación ayuda a reducir los comportamientos anómalos en perros nerviosos

Implementar el enriquecimiento ambiental durante la alimentación de los perros ayuda a controlar la ingestión de comida y el manejo de peso, según un estudio publicado recientemente. Esta técnica también reduce la aparición de comportamientos de búsqueda de comida y otras estereotipias. Otra de sus ventajas es que incentiva a los perros mayores a moverse y hacer más ejercicio.

18/03/2024

Un estudio realizado por veterinarios de la Universidad de Liverpool (Reino Unido) analiza los beneficios de llevar a cabo técnicas de enriquecimiento ambiental a la hora de dar de comer a los perros. El artículo `Bowls are boring´: Investigating enrichment feeding for pet dogs and the perceived benefits and challenges, ...

Un estudio realizado por veterinarios de la Universidad de Liverpool (Reino Unido) analiza los beneficios de llevar a cabo técnicas de enriquecimiento ambiental a la hora de dar de comer a los perros. El artículo `Bowls are boring´: Investigating enrichment feeding for pet dogs and the perceived benefits and challenges, publicado en la revista VetRecord, explica los efectos positivos de este tipo de técnicas, especialmente relacionados con la pérdida de peso en perros obesos y cambios comportamentales en individuos nerviosos. También hace referencia al perfil demográfico de los tutores que llevan a cabo cualquier tipo de enriquecimiento ambiental con sus mascotas.

El enriquecimiento ambiental se utiliza en animales en cautividad y consiste en imitar de la mejor manera posible las condiciones naturales en las que vivirían estos individuos con la finalidad de reducir la aparición de estereotipias y otros problemas de comportamiento.

Este tipo de técnicas ya se están implementando en algunas perreras y se han obtenido resultados positivos, ya que aumenta el ejercicio físico y el comportamiento explorador de estos perros, que suelen tender al aburrimiento y comportamientos depresivos. Con esta misma premisa, el objetivo de este estudio es analizar los beneficios obtenidos en perros domésticos que reciben enriquecimiento ambiental, así como conocer el perfil demográfico de los tutores que más suelen realizar estos tipos de técnicas.

Según los resultados obtenidos, la técnica de enriquecimiento ambiental más común fue el uso de juguetes tipo Kong y, en menor medida, mordedores de cualquier tipo, como huesos o bolas especiales. Además, las mujeres y los tutores jóvenes eran quienes más empleaban estos instrumentos, principalmente por su mayor concienciación respecto a los efectos beneficiosos del enriquecimiento ambiental.

Por el contrario, los tutores de perros de mayor edad se mostraban más reticentes al uso de estas técnicas, ya que opinaban que no conseguirían ninguna mejoría en el comportamiento de este tipo de animales. Sin embargo, en otros estudios, se ha demostrado que el enriquecimiento ambiental en la alimentación reduce los cambios cerebrales relacionados con el envejecimiento en perros mayores, además de mejorar la capacidad de aprendizaje al incrementar la liberación del factor neurotrófico derivado del cerebro.

Principales beneficios

Los principales beneficios observados en el estudio fueron la estimulación mental del perro, la mejoría en su estado de ánimo y el incremento de la actividad física, lo que ayuda a prevenir el aburrimiento y la depresión. Los tutores que llevaron a cabo el enriquecimiento ambiental también indicaron mejorías en su estado de ánimo.

Todos estos hallazgos explican el hecho de que estos instrumentos fueran más empleados en perros con problemas de comportamiento, observándose en la mayoría de ellos cambios positivos, reduciendo la expresión de estereotipias y otros comportamientos indeseados.

La implementación de enriquecimiento ambiental también ha demostrado incrementar el interés por la comida en perros con poco apetito. En este sentido, estas técnicas ayudan a reducir la velocidad de ingesta en perros que comen rápido, haciendo que la comida dure más tiempo. Así, según los resultados de este estudio, los perros que comen en elementos que reducen la velocidad de ingesta tienen cinco veces más probabilidad de no padecer obesidad.

Sin embargo, algunos individuos mostraron comportamientos de frustración al no lograr obtener el alimento del interior de los juguetes tipo Kong. Por lo tanto, es de vital importancia empezar con instrumentos sencillos y ajustar el nivel de dificultad a cada perro para evitar este tipo de comportamientos. Tampoco es recomendable dejar a los animales solos en casa con estos juguetes, sino que el tutor siempre debe estar presente para supervisar que el perro consigue comer sin ningún inconveniente.

Los autores de este estudio concluyen que "los tutores perciben el enriquecimiento ambiental como una herramienta útil en el manejo de problemas de comportamiento, incrementando la saciedad y reduciendo la ansiedad por la comida". Por lo tanto, la implementación de este tipo de técnicas es recomendable para todo tipo de perros, independientemente del nivel de ejercicio que hagan y de su edad. No obstante, es fundamental que el veterinario recomiende el mejor instrumento en cada caso, en función del tutor y del perro, con la finalidad de evitar comportamientos de frustración que sean contraproducentes.