Cerca de 11 millones de hogares de Europa cuentan con un reptil como animal de compañía. La cifra, a pesar ser muy inferior a la de otras especies adoptadas como animales de compañía, ha crecido en los últimos años y ha convertido a los reptiles como la sexta mascota favorita de Europa.

Sin embargo, las cifras son muy distintas según países. Reino Unido es el país europeo más amante de los reptiles, con más de 2,2 millones de vertebrados amniotas en los hogares del país. Le sigue Francia, donde los reptiles también son animales populares en los hogares del país, con más de 2,1 millones de especies. España se sitúa en tercera posición, con 1,4 millones de hogares con reptiles como mascota.

Otros países del centro europeo como Italia y Alemania también se sienten atraídos por estos animales. También lo son en Rusia y Ucrania, mientras que en el resto de los países europeos los reptiles no son muy bienvenidos en los hogares.

Es el caso de países como la República Checa (5.000 animales), Grecia (6.000), Bulgaria (14.000), Irlanda (20.000), Suiza (27.000), Finlandia (29.000), Rumanía (32.000) o Portugal (39.000).

Tortugas, camaleones, iguanas y serpientes: los reptiles más comunes en los hogares de los europeos

Si analizamos los reptiles más populares como animales de compañía en primer lugar encontramos a las tortugas. Las tortugas (que pueden ser terrestres o acuáticas) son animales tranquilos y fáciles de cuidar. Se necesita un acuario o terrario de dimensiones adecuadas según el tamaño del animal. Otro reptil que últimamente ha cobrado mucha popularidad en los hogares es el camaleón. Su capacidad de cambiar de color y camuflarse hace que requiera de un hábitat específico para él dentro de casa. Además, su dieta se basa en insectos vivos, por lo que sus cuidados son algos más complejos.

Algo parecido pasa con las iguanas, otro réptil que se ha vuelto popular como animal de compañía. En el caso de la iguana, cabe destacar que sus dimensiones pueden ser grandes, por lo que se requiere de un espacio amplio para crear su hábitat.

Finalmente, destacan las serpientes. Existe una gran variedad de serpientes de múltiples formas y tamaños. Su alimentación, basada en insectos y pequeños roedores vivos dificulta sus cuidados. Además, es necesario crear un hábitat adecuado para cada especie.