La producción pesquera y acuícola no ha parado de crecer en los últimos años. Y lo ha hecho principalmente gracias al incremento de la producción acuícola. Con una producción de 178 millones de toneladas de pescada, el sector generó una riqueza de 116 billones de dólares en todo el mundo. ...
La producción pesquera y acuícola no ha parado de crecer en los últimos años. Y lo ha hecho principalmente gracias al incremento de la producción acuícola. Con una producción de 178 millones de toneladas de pescada, el sector generó una riqueza de 116 billones de dólares en todo el mundo. La cifra supone un incremento del 80% respecto a los niveles que había en 1990. Hace treinta años, el sector pesquero y acuicultor del mundo producía poco más de 100 millones de toneladas anuales, y cerca del 90% de esta producción se generaba con la pesca de captura.
El aumento de la demanda mundial y la producción en China: principales responsables del aumento de la acuicultura
En 1990, la acuicultura suponía tan solo el 13% de la producción de pescado mundial. Sin embargo, las piscifactorías fueron ganado peso de forma exponencial. Diez años después, en 2020, la acuicultura ya representaba el 26% del mercado de pescado del mundo. Y en 2020 acaparó el 49% del total.
Este incremento se debe, principalmente, al incremento de la demanda mundial de pescado. Pero también a la apuesta decidida de China por la acuicultura. Según datos de las Naciones Unidas, el gigante asiático es el mayor productor de pescado a través de factorías y acapara el 57% de la producción mundial. Esto convierte a China en el principal productor de pescado del mundo, también por su elevado ritmo de pesca por captura. Los datos estiman que China también acapara el 15% de la producción pesquera del mundo.
Las Naciones Unidas también estiman que el sector pesquero y la acuicultura generan cerca de 60 millones de puestos de trabajo en el mundo. De estos, el 84% se crean en Asia.
España, el principal productor de pescado de Europa
En el caso de Europa, España concentra buena parte del sector pesquero comunitario. Según datos del informe The EU fishing fleet publicado por la Comisión Europea, España acapara el 23% de la actividad económica generada por el pescado en Europa. Por otro lado, el crecimiento global del comercio pesquero y del consumo de pescado pone en riesgo la biodiversidad de los océanos, según alertan las Naciones Unidas.