Ceva Salud Animal ha celebrado este jueves su Health Connection con el enfoque One Health sobre la mesa y con un mensaje muy claro lanzado por los cinco expertos que ha reunido para la ocasión en CaixaForum Zaragoza: Una Sola Salud solo podrá ser posible si se entiende como un ...
Ceva Salud Animal ha celebrado este jueves su Health Connection con el enfoque One Health sobre la mesa y con un mensaje muy claro lanzado por los cinco expertos que ha reunido para la ocasión en CaixaForum Zaragoza: Una Sola Salud solo podrá ser posible si se entiende como un esfuerzo multidisciplinar basado en la empatía.
"El enfoque de salud animal nos vincula con una comunidad en creciente evolución con profesionales de diferentes disciplinas, todos bajo un enfoque One Health", ha adelantado el anfitrión del evento, el director general de Ceva Salud Animal, Alberto Llop.
Haciendo hincapié en el ponerse en el lugar de los animales ha centrado su ponencia Xavier Manteca, catedrático del Departamento de Ciencia Animal y de los Alimentos de la Universidad Autónoma de Barcelona. "Un aspecto fundamental para mejorar el bienestar de los animales es el de la empatía. Contribuiría a resolver los problemas que tiene la humanidad".
Precisamente el catedrático ha basado su ponencia en recordar que One Health no será posible si no se complementa con One Welfare (Un Solo Bienestar), ya que del bienestar animal dependerá el humano y, a su vez, esto provocará la mejora de la salud global. Y el bienestar "incluye el estado físico y emocional", ha precisado. Las consecuencias son múltiples: desde la mejora de la producción en animales de granja, que a su vez permitiría reducir problemas humanos globales como el hambre, el cambio climático o las zoonosis.
Otras tienen que ver con los animales de compañía. Diversos estudios, ha indicado Manteca, ya han reafirmado que convivir con perros o gatos mejora la salud física y emocional al liberar oxitocina, una molécula que protege frente al estrés. Lo mismo pasa con las mascotas, ya que si no hay un buen vínculo o si padecen de alguna de estas patologías de origen emocional, la liberación de esa molécula será mínima o bien nula. Por eso ha querido subrayar que la capacidad "de sufrir y experimentar emociones las compartimos los animales vertebrados y algunos invertebrados también, según los neurofisiólogos".
En el plano mental, en su importancia de que se integre en Una Sola Salud, ha basado su exposición Santiago Pérez, director de la Unidad de Psicología HLA Montpellier y psicotraumatólogo en la HLA Moncloa. Porque la memoria si bien es flexible y adaptable, requiere de tratamiento para evitar que los traumas se alarguen en el tiempo y puedan derivar en problemáticas sociales como el suicidio, que afectó a 7,9 hombres y 2,8 mujeres por cada 100.000 habitantes en España en 2020 según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Pero no solo los humanos sufren estos trastornos psicológicos. Pérez ha expuesto cómo los perros también tienen estrés postraumático. Y cómo las mascotas, en casos extremos como en personas violadas o que han sufrido abusos, son la única compañía en la que deciden refugiarse estas para superar sus traumas. Con estos ejemplos de fondo, el mensaje que ha lanzado es que no se puede descuidar la salud mental porque esta "tiene un impacto brutal en la salud global" y por eso, también ha de integrarse en Una Sola Salud.
Estas dos perspectivas han quedado bien claras con la ponencia final del médico-cirujano, conferenciante y escritor Mario Alonso-Puig, quien ha desarrollado un alegato a favor del One Health englobando todas las perspectivas y sin descuidar aquellas que no se ven, pero que están e influyen en el conjunto.
Por esta razón, ha apelado a "ampliar la consciencia, tomar responsabilidad en las acciones que tomamos sabiendo que no podemos solucionar todo pero sí algo, también confiar en que todos podemos hacer algo, y crear un movimiento que nos permita hacerlo".
Tienes que ampliar tu consciencia; tomar responsabilidad, no se puede hacer todo pero sí hacer algo; tener motivación; confianza de que todos podemos hacer algo, crear un movimiento que nos permitan hacerlo.
El origen de las zoonosis
La parte epidemiológica también ha quedado representada con Fernando Fariñas, director del Centro de Inmunología Clínica y Enfermedades Infecciosas del Grupo Ynum Biomedicina. Quien ha evidenciado cómo, cada vez más, la humanidad se expone a enfermedades con origen zoonótico. "De las 1.415 o más enfermedades que afectan a la salud humana, más del 70% de enfermedades infecciosas emergentes tienen origen animal".
Una mínima parte de las 1,7 millones de enfermedades virales que los científicos estiman que existen en el planeta y de las que entre 600.000 y 850.000 podrían ser zoonóticas. Uno de los vectores de contagio, que ya salió a relucir con el posible origen del actual coronavirus, son los murciélagos, cuyo sistema inmunológico tolera gran cantidad de virus, lo que los convierte en reservorios que pueden acabar produciendo enfermedades zoonóticas.
El cambio climático es otro de los grandes enemigos que amenaza a la salud global. Ha propiciado el aumento de vectores de infección como mosquitos tigre, pulgas, garrapatas, etc. o la aparición de hongos como la candida auris, potencialmente mortal en algunos casos. Deriva también en el "estrés térmico" que, según ha expuesto, "puede producir fenómenos de inmunosupresión que provoca muertes masivas de animales terrestres y acuáticos".
A todo lo anterior se suma, ha advertido, el cada vez mayor número de personas con inmunocompromiso, como mayores o quienes padecen alguna enfermedad grave como el cáncer. "A mayor inmunocompromiso y mayor inmunosupresión, las enfermedades infecciosas aparecerán en periodos más cortos de tiempo".
La pandemia de las resistencias antimicrobianas
La Covid ya lo demostró: el uso de antibióticos se potenció para combatir algunas patologías asociadas al coronavirus, como la citromicina, que aumentó hasta en un 400%. "No solo este antibiótico, sino la mayoría, aumentaron en su consumo mucho. En España ya hemos vuelto a los niveles normales de uso", ha señalado Sara Sacristán, miembro de la Unidad de Coordinación del Plan Nacional frente a la Resistencia a los Antibióticos.
Si bien España ya ha vuelto a sus niveles normales de consumo de este tipo de fármacos, Sacristán ha trasladado hasta el auditorio la dimensión que tiene este fenómeno en cuanto a mortalidad: 33.000 muertes anuales solo en la UE causadas por las bacterias. "Este número de muertes suponen más que las causadas por accidentes de tráfico. La ONU ya lo dijo en 2016, cuando alertó de que podría ser uno de los principales problemas a futuro".
Tan relevante es esta cuestión que desde 2014 se impulsa el Plan Nacional de Resistencia a Antibióticos en nuestro país, que llegó a liderar el conjunto de países comunitarios en lo referido a uso de antibióticos. Unos fármacos que llevan sin apenas modificaciones durante más de 30 años. Y no pasaría nada si no fuese porque "las bacterias se multiplican cada 20 minutos, y cuando lo hacen generan mutaciones. Algunas de esas mutaciones les confieren poderes como escudos de protección frente a antibióticos".
No obstante, ha celebrado que desde la acción del Gobierno en 2014 se ha reducido el consumo de antibióticos en humana en un 33% y un 56% las ventas de antibióticos de uso veterinario. Además, ha instado a la "vacunación" para prevenir el uso de estos medicamentos y apelando a la correcta higiene humana y animal, en especial en el caso de animales de granja.
Por una ganadería sostenible
Santiago Vega, catedrático de la Universidad CEU Cardenal Herrera de Valencia, ha dedicado su exposición a demostrar las cualidades de la ganadería sostenible dentro del enfoque One Health. Así, ha señalado cómo las granjas del futuro "deberán estar sustentadas sobre la idea de la bioseguridad, el bienestar y la sostenibilidad económica y ambiental. La ganadería sostenible tiene que ser una adaptada al clima (agricultura y ganadería climáticamente inteligentes), tener una productividad que mejore ingresos y seguridad alimentaria; que se adapte al cambio climático y además contribuir a mitigar la emisión de gases de efecto invernadero".
A su vez, ha querido poner en relieve tres ideas que, en especial, refrendan la necesidad de una ganadería sostenible en el planeta. Por una parte, debido a que la población mundial superará los 10.000 millones de personas como se espera para 2050, la demanda de productos de origen animal se va a multiplicar y solo podrá ser viable si es sostenible. Por otra, ayudaría a la reducción del hambre en poblaciones con escasos recursos. Y por último, sería un gran aliado en la lucha contra el cambio climático.