El Colegio de Veterinarios de Zaragoza organizó en la Feria para l Producción Animal-FIGAN una jornada técnica sobre los retos sanitarios normativos en el sector porcino aragonés, que tuvo lugar 12 a 14 horas, con ponentes de reconocido prestigio, en la que colaboró la Asociación de Veterinarios de Porcino de Aragón. La convocatoria registró un amplio seguimiento y, de hecho, la sala del Centro de Congresos llenó su aforo. En esta feria del sector primario, un evento de referencia, la entidad cuenta con un stand para mostrar las funciones de la profesión veterinaria.

Enrique Novales, jefe del Servicio de Sanidad Animal de Gobierno de Aragón, analizó la situación sanitaria de esta cabaña en la región. Además de subrayar su fortaleza económica por la exportación, se refirió a la necesidad de reforzar los planes estratégicos de bioseguridad en explotaciones porcinas, especialmente en el control de accesos de animales y personas, y control de los purines, limpieza y desinfección, "porque existe un alto riesgo en relación a la entrada y difusión de enfermedades infecto-contagiosas".

Por su parte, José Manuel Corzán, jefe del Servicio de Ordenación, Trazabilidad y Bienestar Animal de la administración autonómica, explicó el esfuerzo del sector por adaptarse a los cambios normativos. "Ha respondido a estas exigencias y en la actualidad destaca por su profesionalidad en las explotaciones", aseguró, antes de mencionar también las modificaciones del RD 1135/2002, en audiencia pública, que disminuye la densidad de animales en los alojamientos para prevenir la caudofagia. Así, se establecen tres tipos de explotaciones según la realización de raboteo y en qué medida.

Reducción de emisiones

La veterinaria de la Sociedad Aragonesa de Gestión Agroambiental, Marta Espada, se detuvo en el compromiso del sector con ECOGAN, donde los resultados obtenidos después de más de tres años de trabajo, avalan la reducción del impacto ambiental en la ganadería intensiva (emisiones de amoniaco y metano, huella de carbono). Se trata un sistema informatizado desarrollado por los ministerios de Agricultura y Transición Ecológica, que registra las mejores técnicas disponibles aplicadas en cada granja. Su finalidad es servir como soporte para el cálculo, seguimiento y notificación de las emisiones en ganadería.

Finalmente, Carlos Cantín, veterinario especialista en porcino, indicó la conveniencia de seguir trabajando en las explotaciones en materia de bioseguridad con monitorización de las diferentes cepas de PRRs (síndrome reproductivo y respiratorio porcino).

Al respecto, solicitó a las administraciones la creación de una mesa de trabajo sobre la enfermedad y ponderó el papel relevante que debe desempeñar la profesión veterinaria en la elaboración de un plan detallado sobre la misma -análisis inicial, detección de factores de riesgos, control y seguimiento- y en la toma de decisiones en las granjas, ante las pérdidas económicas que conlleva. Al final los asistentes formularon diversas preguntas en una mesa redonda.