Cepillado, higiene, alimentación, cariño, ejercicio, juego, visitas al veterinario, etcétera. En esta época del año en la que muchos niños pedirán un perro en su carta a los Reyes Magos, hay que ser conscientes de que la decisión de incorporar un animal a la familia debe ser siempre meditada y ...
Cepillado, higiene, alimentación, cariño, ejercicio, juego, visitas al veterinario, etcétera. En esta época del año en la que muchos niños pedirán un perro en su carta a los Reyes Magos, hay que ser conscientes de que la decisión de incorporar un animal a la familia debe ser siempre meditada y no impulsiva. Por ello, la Real Sociedad Canina de España (RSCE) presentó este lunes un proyecto formativo pionero en España: Soy más bonito por dentro. La idea es educar a los niños sobre la responsabilidad que conlleva tener un perro.
La iniciativa ha arrancado en el Colegio Ingenio de Aravaca, que esta dedicando esta semana al perro, con el plan de extenderse a más centros de España y educar a las futuras generaciones sobre el respeto y la responsabilidad hacia los animales. De la mano de tres criadores familiares y sus tres perros tutores de razas diferentes y caracteres y tamaños bien distintos (Olivia, una Golden Retriever; Like, un Basset Hound y Nilo, un Caniche Toy), los niños aprendieron la importancia de elegir un perro que se adapte al estilo de vida de su familia para conseguir la unión perfecta y evitar el abandono. No hay que olvidar que ésta es una lacra para combatir. Los últimos datos de Affinity revelan que el 13 % de los abandonos se debe a la pérdida de interés. En España, se abandonan 20 perros cada hora.
Se hacía con los niños una actividad práctica dividida en tres estaciones, obediencia, agilidad/juegos y cuidados, donde se aprendía a tener una interacción saludable con los perros a través de ejercicios de cobro (tirar un juguete y que lo traiga), de agility o el aprendizaje de técnicas de cuidados.
En el contexto de este programa pedagógico de la RSCE, en una charla muy interactiva, se enseñó a los niños que un perro no es un regalo pasajero, sino un compañero de vida. Se invitó a reflexionar a los más pequeños sobre las razones que deben motivar la elección de un perro, donde la estética o las modas no pueden estar por encima del carácter, funcionalidad y características esenciales que definen una raza. Pepe Bolaño, coordinador del proyecto y tutor de Olivia, señaló que se ha escogido este colegio porque comparten con la RSCE los valores de respeto a la naturaleza y a los animales. Preguntó a los niños si les gustaban los perros y si sabían cómo acercarse a ellos. Dijo que es importante hacerlo con "naturalidad" y preguntarle al dueño si se le puede tocar. Lo primordial no es que llegue a casa en Navidad, sino que sea el adecuado para cada familia.
Los grandes protagonistas de esta acción, aparte de los niños, son los mencionados Golden Retriever, Basset Hound y Caniche Toy, tres perros tutores concienzudamente elegidos para mostrar cómo la raza influye en su morfología, carácter y predictibilidad, tan importantes para saber que estos animales se adaptan a nuestro estilo de vida y podemos hacerlos felices; y ellos a nosotros.
Bolaño contó la historia de Olivia a través de fotografías. "Es muy importante la labor de los criadores y de las protectoras, que buscan hogares para que se cuiden a los perros", comentó. Olivia es un perro sociable y cariñoso. "Nilo tiene el poder de la agilidad, Like el del olfato y Olivia cobrador", subrayó. Dejó claro que cada perro es diferente. Cuestionó qué es importante a la hora de elegir un perro. Contestaron que sea cariñoso, los datos a la hora de saber la raza. Si el niño es deportista, le vendrá bien un perro que sea activo. Si es un niño tranquilo, uno tranquilo también. Es decir, "es importante saber cómo es por dentro".
Un perro es un ser vivo y, como tal, necesita tiempo, dedicación y compromiso. Hay muchos perros que se abandonan por no hacer las cosas bien. La historia de Olivia, que ya tiene ocho años, es que la familia no se adaptó bien a ella y se la devolvieron a Bolaño. Al final, se quedó en su casa porque no veían a ninguna familia buena candidata a acogerla. "Olivia volvió a casa y pensé que había una razón para que se quedara con nosotros. Vi que tenía muchos talentos. Por ejemplo, cuando yo me enfadaba, ella venía a tranquilizarme. Una de las cosas que me ha enseñado es que no merece la pena enfadarse", afirmó. La razón por la que fue Olivia con ellos fue a entender la vida mejor. Destacó que hay que elegir la mejor familia a los perros. Olivia ha tenido 12 cachorros. Para él, una misión de Olivia, y para lo que volvió a la casa de Bolaño, es para "enseñar esta lección" a los niños. En la charla estuvo acompañado por Mariano Galán Zancajo, tutor de Like, que es tranquilo e independiente, e Ismene Cerezo, tutora de Nilo, que es activo e inteligente. Después, volvieron a salir al jardín con los tres perros.
Con todo, este proyecto pedagógico se convierte en una guía práctica en la que los más pequeños se impregnan de conocimientos básicos sobre cómo convivir con un perro y cómo cuidarlo. Así, se les conciencia de las obligaciones y beneficios que requiere compartir nuestra vida con el mejor amigo del hombre.
Según Alberto Solana, director del colegio Ingenio, en vísperas de Navidad, se unen al programa educativo con perros para enseñar a sus estudiantes "la importancia de la convivencia responsable con estos maravillosos compañeros". Quieren que comprendan que "un perro no es un juguete, sino un ser vivo que merece nuestro respeto y amor". A su juicio, "fomentar la tolerancia y el cuidado hacia los animales es fundamental en nuestra comunidad escolar, y esta actividad refuerza nuestros valores". "Al aprender a cuidar y respetar a los perros, también cultivamos en nuestros niños un sentido de responsabilidad y empatía", concluyó.