La Real Sociedad Canina de España (RSCE), la asociación nacional más antigua relacionada con el mundo del perro, ha pedido, con motivo del Día Internacional del Perro que se celebra este domingo, a las diferentes autoridades encabezadas por el Gobierno central dar cobertura legal suficiente a la figura del llamado criador especializado en domicilio durante el desarrollo de la Ley de Bienestar Animal. De esta manera, España puede sentar las bases para garantizar las mejores condiciones para el perro y erradicar el abandono.

Según datos de la RSCE, el 90% de los perros de raza criados tanto en España como en el resto de Europa proceden de criadores en domicilio. Así lo establece el informe La cría en domicilio y los perros de raza como herramientas para una política de Bienestar Animal, que la RSCE ha presentado a la Dirección General de Derechos de los Animales, perteneciente al Ministerio de Derechos Sociales.

La cría especializada en domicilio es muy positiva contra el abandono animal, como evidencian los datos: casi todos los perros de raza son desarrollados por este tipo de criador. El abandono de perros de raza en centros de protección animal en España es marginal y sólo supone el 5% de los perros detectados en los mismos, según un estudio del Colegio Oficial de Veterinarios de Madrid en el que ha participado la Comisión Científica de la Real Sociedad Canina de España (RSCE).

España, que es uno de los países de Europa con mayores tasas de abandono, se sitúa en cambio en el puesto 20º de los 26 países que aportan datos en cuanto al porcentaje de perros de raza con respecto al número total de perros en el país, sólo por delante de Hungría, Portugal, Polonia, Bulgaria, Rumanía y Turquía.

De los 6,7 millones de perros que hay en España, apenas un 9,5% son perros de raza, entendidos como aquellos ejemplares que tienen un pedigree que certifica su pureza, frente a una media del 20% en Europa. Los cinco países con menos abandonos son, paradójicamente, los que tienen mayor porcentaje de perros de raza sobre el total: Finlandia (61.3%), Suecia (59%), Noruega (58.6%), Irlanda (43,4%) y Dinamarca (34,9%).

Por amor al… perro

Los criadores especializados no ejercen la crianza canina como un negocio profesional para obtener beneficios económicos, sino que actúan movidos por el amor hacia los perros; asimismo, crían un número limitado de perros en su hogar, produciendo también un número acotado de camadas y cachorros.  

La inmensa mayoría son criadores responsables recogidos dentro de la ley, que ejercen un papel muy beneficioso para el bienestar y cuidado de todos los perros. El criador responsable ofrece información relevante a los propietarios sobre las características de cada raza. Investiga si el nuevo hogar al que van a recalar sus camadas es idóneo para el perro y su estilo de vida acorde al temperamento del mismo. También desarrolla cuidados prenatales y neonatales sin importar el tiempo, esfuerzo o dinero invertidos en ello.

Entre las cualidades más importantes del criador responsable y, por ende, del criador especializado en domicilio, están las que tienen que ver con la lucha contra el abandono: en primer lugar, aseguran una trazabilidad absoluta, esto es, la identificación de todos los perros que crían a través de su inscripción en los libros genealógicos de la Real Sociedad Canina de España, de la implantación del microchip o de toda una serie de actividades, pruebas y tests físicos y psíquicos que quedan recogidos en el historial de cada perro, facilitando una valiosa información sobre el animal.

Trazabilidad y registro

En segundo lugar, los criadores especializados en domicilio favorecen el registro, que en la Ley de Bienestar Animal es obligatorio. Por ejemplo, todos los criadores responsables que colaboran con la RSCE están registrados, ofreciendo a todo aquel interesado transparencia sobre la actividad que desempeñan, el número de perros que han criado a lo largo de su carrera así como otros datos de interés.

Desde la RSCE se apuesta decididamente por que la legislación ampare ampliamente este tipo de cría en domicilio para, entre otras razones, combatir el abandono de todas las clases de perros. Asimismo, dotar de prestigio y medios al criador en domicilio también contribuye a dar la batalla contra el tráfico ilegal: el 45% del comercio detectado en la Unión Europea y en sus fronteras es ilegal o sospechoso de fraude de acuerdo con una propuesta de la Comisión Europea dirigida en diciembre al Parlamento Europeo y al Consejo.

Para José Miguel Doval, presidente de la RSCE, "desde el punto de vista de los futuros propietarios y de los propios animales, las ventajas que aporta la adquisición de un perro de raza de un criador responsable, tanto criador en domicilio como profesional, son incalculables. Son ellos los primeros en asegurarse que el perro va a estar en las mejores manos, contribuyendo al bienestar de todos los miembros de un hogar. La cría especializada en domicilio es la mejor herramienta para conseguir el bienestar animal y debe estar reconocida y protegida por la ley y sus reglamentos".