Un equipo de investigación liderado por Anna Zamansky, de la Escuela de Ciencias, Ingeniería y Medio Ambiente de la Universidad de Salford en Manchester, ha desarrollado un sistema informático automatizado que utiliza redes neuronales convolucionales (CNN) para monitorear y analizar los patrones de sueño de los perros. Este avance tecnológico promete revolucionar la manera en que se estudia el comportamiento animal, particularmente en lo que respecta al sueño, un aspecto crucial pero muchas veces pasado por alto en la investigación de bienestar animal.

Los métodos tradicionales de registro del comportamiento animal, como las observaciones directas, son laboriosos y propensos a errores, lo que dificulta la replicación de los estudios. La observación directa del sueño, ya sea en vivo o a través de grabaciones, puede llevar mucho tiempo y ser propensa a errores, lo que ha llevado a que este aspecto sea relegado en la investigación de bienestar animal. Sin embargo, el sueño puede ser un indicador importante del bienestar de un animal.

El sistema desarrollado por el equipo de Zamansky logró una similitud del 89% en la detección automática y cuantificación de la duración y fragmentación del sueño en perros, en comparación con las observaciones comportamentales directas de los mismos videos. Aunque no hubo diferencias significativas en el porcentaje de tiempo de sueño observado, el sistema registró más tiempo total de sueño que los observadores humanos.

Este avance podría tener importantes implicaciones en la investigación de comportamiento animal y bienestar, ya que ofrece una herramienta automatizada y eficiente para el estudio del sueño en perros. Además, al utilizar inteligencia artificial y visión por computadora, el sistema podría aplicarse a otros aspectos del comportamiento animal, abriendo nuevas posibilidades de investigación en el campo de la etología y la biología animal.

El estudio, publicado en la revista Animals, destaca la importancia de la tecnología en la mejora de la investigación científica y el bienestar animal. Con el uso cada vez más extendido de sistemas automatizados como el desarrollado por el equipo de Zamansky, es posible que en el futuro seamos capaces de comprender mejor las necesidades y emociones de nuestros compañeros animales, y así mejorar su calidad de vida.